Las principales formas de dormir son:
Su nombre proviene del hecho de que esta posición se asimila a la que el feto tiene en el embarazo, las piernas se flexionan y se suben ligeramente hacia el pecho. La psicología establece que esta postura es propia de personas que son sensibles, que requieren que se les demuestre cariño y afecto. El consejo que también se da desde la psicología para quienes duermen siempre así es cultivar el amor propio con elogios diarios a sí mismo.
En temas de salud se afirma que esta posición no se recomienda para todos los días, puede generar problemas de espalda y dolores en el cuello. No obstante, es una posición recomendada para disminuir los cólicos menstruales.
Una encuesta reveló que es más frecuente que las mujeres adopten esta postura a que la adopten los hombres. A nivel general es una de las posturas que más se utilizan para dormir; según la encuesta 41 de cada 100 personas duermen en posición fetal.
Piensa en un día abrumado de trabajo, en el que llegas a casa, te quitas los zapatos y caes en tu cama sin mayor preocupación, algo así es lo que refleja la postura de caída libre. Es dormir boca abajo, con las piernas estiradas y los brazos flexionados bajo la almohada o sobre ella.
Para el estudio psicológico es una posición que indica una personalidad con inseguridades y etapas de cambios nerviosos, en ella es normal que se presenten dificultades para aceptar las críticas y se adopte esta postura como una forma de refugio.
Desde el ámbito de la salud esta postura favorece la digestión, el consejo es tener cuidado con la postura de la cabeza: no dormir siempre con la cabeza hacia el mismo lado, cambiar de posición ocasionalmente y permitirle al cuerpo respirar bien.
Es una postura que evidencia serenidad, es cuando la persona se acuesta hacia arriba con las piernas separadas y los brazos flexionados bajo la cabeza o puestos cerca de ella. Es una postura plácida que denota un buen día, un logro o un estado de vida satisfactorio.
Los estudios psicológicos apuntan a que esta postura es propia de personas altruistas, nobles, confiadas y serenas. También se ha dicho que son personas con un gran sentido de fidelidad, lealtad hacia los amigos, personas que saben escuchar y que acompañan a sus parejas o personas cercanas en los triunfos y los momentos difíciles.
La postura de la estrella es, adicionalmente, una postura original. Hay quienes les parece difícil adoptarla, pero una vez se transforma en hábito lo complicado será dejar de dormir de esta forma.
Es una postura diferente a la caída libre pero también con la cabeza hacia la almohada. Se trata de una postura en la que los brazos pueden ir libremente en cualquier lugar y el frente del cuerpo hacia el colchón o el regazo sobre el cual se descanse.
La postura boca abajo se relaciona también con el decúbito prono, una posición indicada para pacientes con problemas respiratorios que puede alivianar os síntomas. De hecho, en la pandemia del Covid-19 se usaba mucho para los pacientes que no debían o no podían ser llevados a una Unidad de Cuidados Intensivos.
Los profesionales de la salud recomiendan que al practicar esta postura se ponga una almohada bajo el abdomen, a fin de evitar problemas con la columna. De ser posible se debe usar solo la almohada bajo el abdomen y ninguna bajo la cabeza.
Es también una postura muy común, mucha gente no duerme boca abajo, ni boca arriba sino de lado, bien sea de lado derecho o del izquierdo. Se llama también de cúbito lateral y es de las más recomendadas por los médicos especialistas del sueño ya que evita los dolores cervicales, de espalda, disminuye los ronquidos, mejora la respiración y disminuye el reflujo.
Lo que se recomienda en esta posición es que la almohada sea de buen grosor, de manera que de soporte a la cabeza y exista una alineación con el eje de las vértebras. Además el colchón debe ser firme para que no se hunda por el peso diario.
Hay que tener en cuenta que esta posición también debe variar ocasionalmente. Por otra parte, no se debe dormir seguido sobre el mismo brazo y evitar esta posición cuando haya algún problema con los músculos o hueso del brazo.